Cuando nos enfrentamos ante los desastres naturales lo primero que debe hacerse es repetirnos con total seguridad las siguientes palabras: “Dios es amor”, de esta manera abrimos el camino de la fe para recordarnos lo importante, y eso es que aquel quién nos ama y nos da la vida, con certeza jamás sería capaz de volver a destruirnos, ni castigarnos con la creación con la que Él mismo nos ha bendecido.
Una vez entendido y asimilado esto es necesario, aclara que, así como infinito es su amor, así de infinita es su fidelidad. Pues es ahí en donde el Señor manifiesta su compromiso con la creación manteniéndose fiel incluso a las leyes naturales que ha dictado para el correcto funcionamiento de nuestra casa común.
Oración de protección
Jesucristo es Rey de la Gloria,
Señor de cielos y tierra.
Dios se hizo hombre.
El Verbo se hizo carne.
Cristo nació de la Virgen pura.
Cristo padeció. Cristo fue crucificado.
Cristo murió. Cristo resucitó de entre los muertos.
Cristo ascendió a los cielos. Cristo vence.
Cristo reina. Cristo nos salva. Cristo ordena.
Protégenos Señor de todas las tempestades
(huracanes, tornados, terremotos)
Jesucristo Salvador del mundo y
María Santísima están con nosotros.
Señor Jesucristo pon en fuga a los espíritus malignos.
Ha vencido Jesús, el León de la tribu de Judá,
la raíz de David, el Cordero de Dios…
Santo Dios. Santo Fuerte. Santo Inmortal.
Ten Misericordia de nosotros.
Amen.
