En la palabra está escrito, específicamente en el libro de Apocalipsis, Dios es el principio y el fin. Él es el Todopoderoso. Esta es una verdad muy poderosa cuyo significado continúa trascendiendo los tiempos hasta el día de hoy.
Porque, todo lo que El hace, cualquier situación que ponga en tu camino conlleva la intención de poner a prueba tu fe y mejorarte como su siervo. Por ello, no importa lo que pase, siempre debemos resguardarnos en la Palabra. Pues en todo momento debemos seguir en comunión con Dios mediante la oración para así seguir siendo bendecidos con su gracia divina.
Oración para Dios
Hoy te traigo, Señor, esta tristeza
de saberme sin gozo y sin herida,
hoy te traigo, Señor, esta dolida
voz de arrepentimiento que te reza.
Te devolví en espinas y aspereza
la miel que derramaste por mi vida.
Sálvame Tú, Señor, esta vencida
primavera de angustia que ahora empieza
Si malgasté un amor, y otro a mi lado
dejé morir sin luz en la cadena candente
de la carne amarga y triste,
hoy te vuelvo lo poco que he salvado,
porque, Señor, la angustia que me llena
mayor pudo haber sido, y no quisiste.
Amen.