Oración de Liberación
EL ALCOHOL, ESE ENEMIGO SILENCIOSO
Señor mío, mi fuente de única calma:
La depresión nuevamente se hace presente mi Dios, luego de recobrar conciencia y recordar, con lo poco que puedo, los momentos de farra y de juerga que viví la noche anterior, cual círculo vicioso amenaza con no dejarme nunca. A ti acudo para que me rescates del alcohol, de mi vicio y mi falta de control para decir no.
El alcohol se ha convertido en una constante que temo me aprisione para siempre, pues cuando se presentan estos momentos de debilidad, es entonces cuando más me doy cuenta que no puedo luchar contra este enemigo silencioso. En algún rincón de mi conciencia, te tengo olvidado o ignorado, y confieso que siendo así, acabo actuando de manera deliberada e inconsciente.
Ayúdame mi Dios, a darme el poder de voluntad para hacer frente a esto que tan dañino es para mi vida. Ayúdame a ser sabio e inteligente para darme cuenta cuando se me presenten estas nefastas oportunidades de entregarme a este vicio dañino y saber ponerle un alto de manera consciente, por más que la batalla en mi mente y en mi consciencia se torne dura, pero todo sea para poder salir de este estado de miseria en el que me encuentro.
Ayúdame Padre mío para poder entender que estos malos hábitos me están convirtiendo en alguien que no soy, y permíteme recordar más bien quién era yo antes de que esto cambiara mi vida por completo, para que retorne de nuevo a esos tiempos de sencillez y de humildad y de nuevo pueda retomar el rumbo de mi propia vida, porque este vicio dañino me tiene como marioneta entre esos hilos que se han profundizado mucho en mí.
Todo se haga de acuerdo a tu voluntad para tranquilidad mía…
Amén.
